22.2.07

Algo imposible de perder…


Algo imposible de perder…

El origen del carnaval es muy antiguo, por lo tanto imposible de perder, según algunos historiadores se remontan a la época egipcia, hace unos 5000 años, pero los valores han cambiado mucho, en la antigüedad era una fiesta cristiana en la que se celebraba la llegada de la cuaresma y el tiempo de ayuno, pero actualmente las fiestas de carnaval se han separado totalmente de dicho sentido religioso.
¿Podéis imaginar Brasil, Venecia, Las Islas Canarias, Cádiz… en febrero sin las fiestas de carnaval? Obviamente no, ya que es una de las tradiciones más importantes de estos lugares y en la que todo el mundo se encuentra alegre y feliz por unos días.
Lugares como estos, donde dicha fiesta tiene gran relevancia, se produce la llegada masiva de visitantes con ganas de diversión y alegría.
En estos días la gente decide buscar el disfraz más original y divertido para lucir en estas fiestas; algunos decidirán hacerlo ellos mismos, y otros (los mas cómodos) decidirán ir a buscarlo a una tienda.
No debemos olvidar curiosas las Chirigotas que relatan irónicamente sucesos importantes de la actualidad.
Sumadle a todo esto, música, ruido, bailes y sobre todo ganas de fiesta.
Y termino con una pregunta, ¿Cómo es posible que cuatro vecinos (de Tenerife) quisieran acabar con tal tradición? ¿Tanto molesta el ruido durante tres días de fiesta, cuando muchísima gente lleva planeándolo con meses de antelación?
Pues si tanto les molesta que se vayan de vacaciones a otro lugar tranquilo, pero no es normal intentar acabar con una tradición de más de 5000 años.
Pienso que a mucha gente estas fiestas le sirven de evasion de problemas y preocupaciones, que la verdad creo que ya tenemos suficientes durante todo el año, y tres días a fín de cuentas no le hace mal a nadie.

2 comentarios:

Enrique P. Mesa García dijo...

Una pregunta cn mala idea:
los sacrificios humanos son muy antiguos, ¿por lo tanto imposibles de perder?

sheila_vega dijo...

No, los carnavales son unas fiestas muy antiguas en las que todo el mundo está alegre y nadie hace mal a nadie, pero por lo contrario en los sacrificios humanos, aunque también se consideraban fiestas, se eliminaban vidas humanas sin ninguna razón. Por lo tanto, eso si se debe perder.